BUENOS DÍAS DE NUESTRO ORIENTADOR, NELSON QUINTERO
PROPÓSITOS PARA EL AÑO NUEVO
¿Has cumplido ya con la costumbre de revisar tu
vida y plantearte propósitos para el año nuevo? Si no lo has hecho, aún estás a
tiempo.
Hoy te quiero invitar a que te esfuerces para cumplir
y vivir según los propósitos que te marques en este inicio del 2023. Tras la Navidad,
continuamos el camino, continúa tu camino y esos buenos propósitos que realizas
son un buen complemento emocional para avanzar hacia la siguiente etapa.
-
que sean realistas
-
que entren en tu agenda diaria o semanal
-
que puedas medir el tiempo y las acciones que vas a dedicar
para su cumplimiento
-
que los compartas con personas que puedan dar testimonio de
su cumplimiento, recordártelos si se te olvidan y darte ánimo si en algún
momento aflojas
Puede ser que te hayas planteado propósitos
materiales: nuevo teléfono, un viaje, un cambio de coche, un patinete eléctrico.
Esto está bien, siempre que estos objetivos no los definas como una meta, sino
como medios para algo más importante, como proveerte un mayor bienestar para ti y para los que te
rodean. Recuerda, antes de realizar propósitos materiales, preguntarte si de
verdad los necesitas.
Puede ser que te hayas planteado propósitos que te
ayuden a ser mejor persona: dejar de meterte con tu hermano menor, mostrarte
más cercano con tus alumnos, hacer ejercicio un par de veces en semana, organizar
mejor tu estudio, pasar menos tiempo con
las pantallas, hacer esa llamada que tienes pendiente. En esta línea, te
propongo algunos que están al alcance de todas las personas y que tú también
puedes conseguir:
1.
Empieza el día, dando gracias: Por estar
vivos, por las personas que te rodean, por la posibilidad de emprender un día
nuevo. Las personas agradecidas son más felices y experimentan un mayor
bienestar emocional.
2. Elige confiar: En Dios, en ti
y en los demás. Las personas que desconfían, son suspicaces y piensan mal de
los demás, suelen sentirse a disgusto y generan mal ambiente a su alrededor.
3. Evita los chismes y deja de ver “la
paja en el ojo ajeno”: Es por todos conocida la rapidez de nuestra
lengua para desatarse y correr, cual caballo desbocado, en contra de alguien
más. Piensa antes de hablar y, si lo que vas a decir no va a sumar y no va a
ser mejor que el silencio, deja la lengua quieta.
4. Mira en tu interior ¿Cómo estás?: ¿Qué tal como
propósito de este año mirar a nuestro interior cada vez que algo nos parece
mal? Porque es un hecho irrefutable que casi siempre que nos disgusta algo que
vemos que otro hace, ¡es porque en el fondo nos disgusta que nosotros hacemos
lo mismo!
5. Ayudar y ser generadores de cambio. Cuando algo
te parezca mal, piensa cómo ayudar para corregirlo o cambiarlo y actúa en
consecuencia. Si no puedes hacer nada por mejorarlo, el silencio y ocuparte de
tus propios errores será la mejor opción.
6. Deja de ofenderte y enfadarte por
tonterías: ¿Eres de las personas que se ofenden porque alguien no
te saludó? ¿Te indignas porque el profesor no te vio al pasar por tu mesa? ¿Estallas
porque tienes un alumno en clase que va más despacio? ¿Entras en cólera porque tu
amigo ahora se habla con alguien que no te cae bien? ¿Y, en consecuencia, gritas,
insultas, ofendes, te vengas, tomas represalias y, lo peor, ¡te amargas la vida
y se la amargas a los demás!? Este año Puedes hacer el propósito de evitar ofenderte
y enfadarte por estas cosas. Además de vivir en paz con los demás, te sentirás
mejor contigo mismo.
7. Organízate y trabaja para conseguir
tus objetivos académicos y laborales: Empieza por
organizar tu mesa, tus apuntes, tu mochila, tu habitación. Si no lo tienes aún,
establece un horario de estudio y de trabajo, ponlo a la vista, compártelo con
tu familia y persevera en su cumplimiento. Para conseguir tus objetivos, además
de desearlo, hay que echarle horas.
8. Pasa tiempo con tu familia. Cada persona
sabe cuál es su “estación de recarga” y qué personas le transmiten la energía
necesaria para seguir cada día. La familia suele ser ese lugar en el que
encontrar amor y cariño incondicional por parte de las personas que mejor te
conocen. Las comidas, las conversaciones o los juegos en los ratos de
sobremesa, los paseos por el campo o la práctica de algún deporte en familia
son recargas de energía seguras.
9. Disfruta. Si no te ríes, mala
señal. Procura garantizarte un espacio de disfrute y risas, por lo
menos una vez a la semana. Lo ideal sería que encontraras disfrute y ratos de
diversión en el trabajo y el estudio. Además, resulta muy saludable proveerte
de espacios de disfrute y risas, por lo menos una vez en semana. Si no los
tienes, búscalos con urgencia, tu salud y tu bienestar está en juego.
Deseo que encuentres la energía necesaria para
cumplir tus propósitos para el año que comienza. Que Dios te bendiga, ilumine tu
camino, te permita soñar grande y te ayude a alcanzar cada una de tus metas.