DAR SIN ESPERAR NADA A CAMBIO…
¡Muy buenos días!
Avanzamos en nuestra semana solidaria e inmersos de lleno en
nuestra operación kilo y cesta de Navidad. Hoy queremos pararnos un momento a
reflexionar sobre lo que significa DAR, AYUDAR. Sí, dar y ayudar es lo que
estamos haciendo esta semana con la campaña solidaria y en otros momentos del
año con otras campañas con las que vivir en nuestro interior la solidaridad y
la empatía. Pero ahora vayamos un poco más allá. ¿Te has parado a pensar el por
qué ir por la vida ayudando a los demás? ¿Por qué lo hacemos? Aparte de ayudar
a esas personas, ¿Qué buscamos? ¿Damos siempre sin esperar nada a cambio? Y no
solo hablamos de dar productos sino de dar nuestro tiempo, nuestra atención,
nuestro consuelo, nuestra alegría… ¿Somos desinteresados en nuestras acciones?
¿Cómo te sientes cuando ves que has podido ayudar a alguien y hacerle un poquito
más feliz?
Si te das cuenta, nadie piensa “que mal me siento cuando
ayudo” o “no siento nada cuando ayudo” sino todo lo contrario. Podemos decir
que todas las personas que ayudan a los demás sienten que ellos al final
reciben mucho más de lo que dan.
Por lo tanto, ayudar es mucho más que dar. Es recibir, es
experimentar, es encuentro, es comprensión, es escucha, es voluntad, en definitiva,
es AMOR. Y el amor es lo que mueve todo lo bueno e importante de este mundo.
Veamos un ejemplo…
ORACIÓN: Madre Auxiliadora, te pedimos que, en este tiempo
de Adviento, de dulce espera al nacimiento de Jesús, nos agrandes el corazón. Que
demos y ayudemos de CORAZÓN. Que no necesitemos reconocimiento de nadie, sino
solo la necesidad de apoyar a los que lo necesitan sin esperar nada a cambio
más que el amor que recibiremos de vuelta, que es lo único que importa.