PRIMER TRIMESTRE: CONVIVIR Y COMPARTIR

miércoles, 9 de octubre de 2024

 

Cuando la Fe y la Perseverancia Superan las Expectativas


Hoy vamos a reflexionar sobre una historia que quizás muchos no conozcáis, pero que refleja el poder de la perseverancia, el apoyo familiar y la visión más allá de las limitaciones impuestas por los demás. Hablo de la historia de Thomas Edison, el famoso inventor que, cuando era niño, fue expulsado de la escuela. Pero lo más impactante no fue la expulsión en sí, sino cómo esta situación fue transformada por el amor y la fe de su madre.

El legado de Edison y su impacto en la sociedad

Thomas Edison es, sin duda, una de las figuras más importantes en la historia de la ciencia y la tecnología. A lo largo de su vida, patentó más de 1,000 inventos, muchos de los cuales cambiaron radicalmente el curso de la sociedad moderna. Entre sus más conocidos están la bombilla, el fonógrafo y el kinetoscopio, el precursor del cine moderno. Cada uno de estos avances, aunque hoy los demos por sentados, representaron una revolución en su tiempo.

 


 Más allá de sus inventos, lo que realmente podemos aprender de la vida de Thomas Edison es el valor de la fe y la perseverancia. Aunque la carta de su colegio decía que no había esperanza para él, su madre creyó en su potencial. Este acto de amor y fe maternal nos recuerda la importancia de creer en el otro, de ver más allá de las limitaciones y de confiar en que cada persona tiene algo único que aportar.





 En muchas ocasiones, la vida nos presenta retos y adversidades, pero tal como dijo Jesús en Marcos, 9: 23, "Si puedes creer, al que cree todo le es posible”. La fe de la madre de Edison, su decisión de no aceptar las palabras negativas del colegio, es un ejemplo del poder transformador que puede tener creer en alguien. Es un recordatorio de cómo, como cristianos, estamos llamados a tener fe no solo en Dios, sino también en los demás, especialmente en aquellos que el mundo pueda rechazar o subestimar.

La historia de Edison también nos muestra el valor del esfuerzo continuo. A lo largo de su vida, experimentó miles de fracasos, pero nunca se rindió. Sabía que cada fallo era solo un paso más hacia el éxito. Esto nos recuerda la parábola del sembrador en el Evangelio, donde solo una pequeña parte de las semillas cae en tierra fértil y da fruto. En nuestras vidas, como en la de Edison, es importante no rendirnos ante los obstáculos, sino seguir trabajando y confiando en que Dios tiene un plan para cada uno de nosotros, incluso cuando no lo vemos claramente.

 

Oración:

Dios te salve María...


María Auxilio de los Cristianos, ruega por nosotros.

Vivir es nacer a cada instante (Erich Fromm)